Historía
La institución Manos Amigas para Bendecir nació el 13 de septiembre
de 2008 en la colonia Lomas del Río, Comayagua, en el hogar de la
familia Cardona-Fonseca, con el propósito de ofrecer oportunidades
educativas a niños y jóvenes en situación de pobreza. Estos niños,
lejos de vivir una infancia plena, trabajaban como pepenadores y
enfrentaban hogares rotos y hambre constante.
A pesar de carecer de recursos básicos como pupitres o pizarras, un
grupo de maestros voluntarios inició el proyecto con 36 alumnos de
primero a sexto grado, impulsados por el deseo de cambiar vidas. Los
años que siguieron fueron difíciles, pero la institución creció con
esfuerzo, acogiendo hoy a 150 estudiantes de séptimo a undécimo
grado, y brindando una educación más completa con laboratorios y
equipos.
Los padres, también afectados por la pobreza, se sumaron al
esfuerzo, recibiendo apoyo y contribuyendo al desarrollo de la
institución. Manos Amigas para Bendecir ha sobrevivido como un
refugio de esperanza, donde el dolor del pasado ha dado paso a un
futuro lleno de oportunidades.